5 mitos sobre la dieta basda en plantas

Hoy vamos a abordar algunos de los mitos principales sobre la dieta plant-based, revisando las últimas investigaciones y la voz de muchos expertos en este campo.

Si estás pensando en llevar una dieta basada en plantas o plant-based, seguramente hayas escuchado muchos comentarios, opiniones que no te ayuden mucho a seguir en esta decisión. ¿Qué hay de verdad detrás de estos mitos?

Mito 1. “Necesitas combinar proteínas en cada comida para tener proteínas completas”.

Combinando diferentes fuentes de proteínas vegetales a lo largo del día, se pueden obtener todos los aminoácidos esenciales necesarios para una salud óptima.

La complementariedad proteica o mezcla de proteínas hace referencia a combinar fuentes proteicas vegetales con diferentes aminoácidos limitantes para así conseguir una distribución más similar a la necesaria para los seres humanos.

El concepto de la complementariedad de proteínas se popularizó en la década de los 70 gracias a Frances Moore Lappe y su libro «Diet for a Small Planet«. En el libro se explicaba cómo combinar proteínas vegetales (lentejas + arroz) en cada comida podía ser una estrategia obtener una proteína «completa». Sin embargo, este enfoque resultó complejo para muchas personas y fue el comienzo de este mito sobre las proteínas vegetales.

Parecía que se necesitaba una elección cuidadosa de alimentos para obtener suficiente proteína sin carne, cuando en realidad era más sencillo de lo que se creía.

Desde 1980, sabemos que nuestro hígado es capaz de almacenar diversos aminoácidos esenciales y que nuestro cuerpo tiene un pool de aminoácidos que hace innecesario consumir alimentos complementarios en la misma comida ni incluso en la misma hora.

Una variedad de alimentos vegetales a lo largo del día puede proporcionar todos los aminoácidos esenciales, antes de mirar si estamos complementando nuestras proteínas vegetales debemos ver si añadimos fuentes diferentes y las consumimos en cantidades adecuadas a lo largo del día.

Mito 2: “Las dietas basdas en plantas son monótonas y limitadas en opciones”.

Hay una gran variedad de alimentos vegetales. Esto incluye:

  • Frutas.
  • Verduras.
  • Legumbres, soja y derivados.
  • Frutos secos y semillas.
  • Especias y condimentos.
  • Cereales y tubérculos.

Además, gracias al aumento de este movimiento hay cada vez más opciones disponibles en tiendas, restaurantes, lo que facilita seguir una dieta vegana a largo plazo.

Mito 3: «Comer vegano es caro y está fuera del alcance para la mayoría de las personas».

Una dieta basada en plantas, vegetariana o vegana, que se centra en alimentos básicos como: legumbres, granos enteros, frutas y verduras de temporada. Es más asequible que una dieta que incluye productos de origen animal (si elegimos aquellos que son de calidad). Aquí surge la cuestión ¿cómo es la calidad de los productos que compras?

Sí comparamos fiambre de 1€ vs bebida de anacardo pues sí, seguramente la 2º opción sea más cara PERO ninguna son necesarias para una alimentación nutritiva y saludable.

Mito 4. “La alimentación basada en plantas es poco nutritiva”.

Si está bien planificada y adaptada a nuestras necesidades, podemos obtener todos los nutrientes necesarios en una dieta vegetariana/vegana.

Aunque este mito es común para la dieta plant-based, lo cierto es que no es tanto que la alimentación basada en plantas por sí misma no sea nutritiva, sino que:

Falta de conocimiento + elección inadecuada + falta de personalización = dieta desequilibrada.

Esto es válido en cualquier tipo de alimentación, omnívora, paleo, keto…

Mito 5. “Estar en forma y tener músculo no es compatible con una dieta vegetal”.

Los veggies pueden y son también personas activas, fuertes y deportistas. Los atletas vegetarianos son capaces de alcanzar sus necesidades de energía y nutrientes con una adecuada planificación, que les permita obtener toda la energía, grasas, hidratos, proteínas, y otros nutrientes que su cuerpo necesita.

Estudios recientes concluyen que las dietas basadas en plantas es una opción viable para apoyar adecuadamente el rendimiento deportivo y al mismo tiempo contribuir a la salud física y ambiental en general.

En resumen

Cada cuerpo es diferente y que la clave para cualquier alimentación nutritiva es la calidad, el conocimiento y la planificación para asegurar obtener todos los nutrientes necesarios para mantener una buena salud.

Si estás pensando en reducir el consumo de productos de origen animal, pero andas un poco perdido/a y no sabes cómo empezar, te dejo por aquí 6 claves para empezar una dieta plant-based.

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